El éxito es complicado.
Uno desea el éxito, lo busca, lo persigue, se esfuerza... pero, ¿qué busca uno? Me gustaría saberlo. ¿Individualidad? Marcar con un rotulador bien gordo el contorno de tu existencia. Porque la vanidad no justifica tanto esfuerzo, esa lucha, el desgaste... y el desapego. Marcar con rotundidad el contorno de tu existencia es como dibujar una barrera, ¡eh, aquí estoy yo!, soy tan diferente que os abrumo. Y, luego, alejarse, ser envidiado, marginado... y vuelta a empezar.